Contra Naturam

 

Crítica literaria – Contra Naturam, de José Luis Vías García.

Contra Naturam

Acabo de finalizar la lectura de Contra Naturam, de José Luis Vías García, y aún me acompaña una sensación profunda de conmoción y gratitud. Pocas veces me he encontrado con una obra que combine de forma tan precisa la hondura emocional con una prosa tan pulida y elegante. Este libro es mucho más que un testimonio o una evocación: es un acto de amor escrito con rigor literario y una lucidez que deslumbra.

La figura de la madre, que vertebra toda la obra, está tratada con una ternura sin edulcorar, con una mirada a veces cruda, otras llena de luz, pero siempre sincera. El autor reconstruye momentos de su vida compartida con ella, no desde la idealización, sino desde la verdad del recuerdo: la verdad que duele, que emociona, que nos devuelve a lo esencial. Es imposible no sentirse interpelado, porque Contra Naturam toca fibras universales desde una historia profundamente personal.

Uno de los grandes aciertos del libro es, sin duda, su riqueza de lenguaje. Vías García escribe con una amplitud léxica que se agradece, con frases de una musicalidad contenida, pero envolvente. Cada palabra está elegida con precisión y belleza, y la prosa avanza como una corriente serena pero firme, que invita tanto a la contemplación como a la reflexión. Hay pasajes enteros que merecen ser subrayados, releídos, saboreados como quien vuelve a una melodía inolvidable.

El texto destila autenticidad. No busca convencer, ni impresionar; simplemente abre una ventana al alma del autor, y desde ahí, nos invita a mirar también hacia adentro. La memoria, el duelo, el paso del tiempo, los vínculos que nos definen… todos esos grandes temas están presentes, pero tratados con una sensibilidad extraordinaria, sin estridencias, con humanidad.

Contra Naturam es, en definitiva, una obra que honra la literatura y honra la vida. Es un testimonio íntimo convertido en arte, un libro que conmueve sin esfuerzo porque está escrito con el corazón y con la pluma de alguien que sabe lo que hace. José Luis Vías García no sólo rinde homenaje a su madre: también nos recuerda a todos lo que significa amar, recordar, y escribir desde lo más profundo de uno mismo.

Altamente recomendable para quienes valoran la literatura que no teme mirar de frente a la emoción, que cuida el lenguaje y que deja huella.

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